A raíz de los acontecimientos con motivo de la polémica desatada durante la investidura de la actual presidenta de México Claudia Sheinbaum por la no invitación del rey Felipe VI a la citada ceremonia, se ha dado lugar a múltiles debates en diversos foros. Es por ello por lo que desde ESdiario queremos recopilar breves relatos y recoger testimonios de ciudadanos e historiadores de Hispanoamérica que nos dan su versión de la época virreinal española pues en realidad sabemos lo que piensan algunos políticos de este proceso histórico, pero ¿qué dicen los ciudadanos hispanos al respecto?
GRANADA, EL INICIO DE LA HISPANIDAD
Tras el preámbulo de lo que pretendo plasmar en el artículo, antes de proseguir, les indico que este tema me es de sumo interés porque siempre me ha gustado la historia y además se da la circunstancia de que soy descendiente directo de Pedro Martínez de Peralta y Ruiz de Azagra.
Conocido como Mossen Pierre de Peralta (Señor de Peralta), padre de Pedro de Peralta y Ezpeleta (Peralta el Joven) quién acordó el matrimonio entre los Reyes Católicos. Os quiere hacer partícipes de una historia que empezó hace más de 500 años y cuya efeméride comenzó a fraguarse tan solo hace tres días: 1492.
Con motivo de la conmemoración de dicho suceso histórico, el día 2 de enero tuvo lugar en la ciudad de Granada, la celebración del conocido como Día de la Toma cuando los Reyes Católicos, Isabel y Fernando, fueron capaces de culminar la unificación española dando lugar al nacimiento de España, el estado moderno más antiguo de Europa.
Dicho acontecimiento no sólo tuvo repercusiones a nivel peninsular sino global, pues tras dicho episodio histórico y tras las capitulaciones de Santa Fe (localidad muy cercana a la ciudad de Granada) Cristóbal Colón acordó con los Reyes Católicos los pormenores de lo que sería el equivalente actual al patrocinio de la expedición que daría lugar al Descubrimiento de América el día 12 de octubre de 1492 y a la sucesión de más viajes que culminarían con el nacimiento de lo que hoy conocemos como Hispanoamérica.
Para ser francos, los inicios no fueron fáciles pues dos mundos muy distintos se encontraron y se produjeron diversos episodios violentos. Sin embargo, la existencia de un enemigo en común que eran los Mexicas, que se han denominado de forma no del todo correcta como Aztecas, tribu que tenía sometida al resto de tribus mesoamericanas y a la capacidad autocrítica de la Monarquía Española con la promulgación de las Leyes de Burgos de 1512 y a las Nuevas Leyes de 1542 permitieron en gran medida enmendar los errores cometidos y lograr la unión entre la Península Ibérica y lo que hoy en día es Hispanoamérica para constituir una entidad política conocida como Nueva España que se dividía en diversos virreinatos que tenían un estatus similar al de las comunidades autónomas de la España actual de forma que sus habitantes gozaban de los mismos derechos que los ciudadanos peninsulares. El Imperio Español no fue un imperio depredador, sino más bien integrador pues fusionó la tradición grecorromana con la de la América precolombina para dar lugar a Hispanoamérica.
Dicho acontecimiento, como consecuencia de la competencia de potencias enemigas que deseaban ostentar la riqueza española, trató de ser infravalorado creando la conocida ‘Leyenda Negra’ que pretendía humillar a España y matar a esa maravillosa obra integradora haciéndola pasar por genocidio. Aquellas potencias pudieron pensar que con sus actos lograron que el concepto integrador entre España e Hispanoamérica había muerto, pero como decía el gran cantante mexicano de rancheras Vicente Fernández, conocido como ‘el Rey’: “Nadie está muerto hasta que lo olvidan”. De este modo, más allá del Atlántico se habla en español, se sueña en español y se recuerda ese pasado en el que España no conquistó Hispanoamérica, sino que juntos fueron un imperio.
Hoy en día existen historiadores hispanistas desde el otro lado del Atlántico como el mexicano Juan Miguel Zunzunegui y el argentino Marcelo Gullo que nos muestran que la Hispanidad sigue más viva que nunca porque no se la ha olvidado. Realizan un gran trabajo de investigación, revisión y divulgación histórica además de participar en eventos de asociaciones hispanistas como HispaUnidad, asociación española con tan sólo cuatro años de vida pero comprometida con la causa hispanista que junto a otras buscan el hermanamiento y acercamiento con los pueblos hispanos de ambos lados del Atlántico y que a través de su encomiable esfuerzo divulgador están siendo capaces de ayudarnos a recordar a los hispanos quiénes somos y de dónde venimos.
Gracias a ellos he tenido el valor de escribir este artículo para contar que mi interés genuino por el tema de la Hispanidad comenzó a raíz de mi trabajo como asesor empresarial y administrativo en Granada que me hizo descubrir lo qué eran las leyes de ciudadanía y de lo que pueden implicar pues van más allá de lo administrativo pues muchas de ellas ponen en valor el Ius sanguinis o derecho de sangre por el cuál tanto españoles como hispanoamericanos estamos unidos pues el que más o el que menos tiene a un ancestro al otro lado del Atlántico respectivamente, en mi caso además del pasado nobiliario indicado, mi abuela por parte paterna nació en Uruguay y por dicha razón también tengo una parte en mi sangre de hispanoamericano además de otros ancestros por línea materna enterrados en Perú y Argentina.
Este interés no es exclusivo mío sino también de los habitantes del otro lado del Atlántico quiénes a raíz de leyes de ciudadanía como la de Memoria Democrática de España han empezado a interesarse por sus orígenes y se han dado cuenta de que entre España e Hispanoamérica además de la lengua existen más elementos que nos unen de los que nos separan como algunos intereses trataron y tratan de hacer.
A este respecto he tenido el placer de hablar con el historiador mexicano Juan Miguel Zunzunegui quién apenas sin conocerme tuvo la gentileza de concederme parte de su tiempo para compartir su opinión sobre este tema conmigo.
Jesús Legaza Ruiz de Peralta- en adelante JLRDP: Buenos días allá en México Juan Miguel ¿Cómo está?
Juan Miguel Zunzunegui-en adelante JMZ: Muy bien, perdona el retraso, al final logré escaparme.
JLRDP: ¡No se preocupe! Entrando en materia, el ser humano ende a competir y es lógico que las potencias rivales de España contaran un relato en contra de ella, pero ¿cree usted que parte de la decadencia del Imperio Español pudo venir por el gran desgaste que le supuso hacer frente a la Guerra de los 30 años en Europa contra los protestantes?
JMZ: “Hubo desgaste, pero debemos entender que, para Carlos V, dentro de la mentalidad de la época era un romántico, un romántico en el sentido de que para él lo más importante no era defender un territorio como podría ser un imperio sino los valores de la cristiandad aun arriesgándolo todo por una causa moral más que por un motivo económico.
JLRDP: Ahora que lo dice, a los españoles siempre nos han dicho ‘Quijotes’ en el sentido de dar más importancia a la consecución de un fin vinculado más a un valor que a una recompensa económica.
JMZ: Pues es curioso ahora que hablas del Quijote, en México se nos enseñaba en literatura como una forma de hacer burla de un personaje considerado como loco que no era nada más que por simbolizar la defensa de los principios de honor y caballería medievales. El hecho de dar más importancia a los valores sobre los aspectos económicos como hicieron los ingleses explica también el hecho de que España no fuera más rica y ellos no sólo terminaran apoderándose de la economía sino del relato histórico también.
JLRDP: En cierta ocasión una amiga mía de Argentina me comentó que los brasileños y los descendientes de los afroamericanos sí tenían una imagen negativa de España, corríjame si me equivoco, pero creo recordar que Brasil fue de Portugal y que éste siempre ha sido aliado de Inglaterra.
JMZ: Sí, eso se produjo por la parte de Portugal, pero no hay que olvidar que Portugal ha tenido una asociación comercial con Inglaterra desde el Siglo XIII y los ingleses de la época siempre echaban la culpa a España de las atrocidades que ellos cometían tales como el comercio de esclavos africanos o la propagación de la viruela a través de la contaminación de mantas pues en el caso de España, la transmisión fue involuntaria y los descendientes de los afroamericanos no fueron esclavizados sino formaban parte del personal doméstico de las casas de los nobles de la España virreinal.
JLRDP: Ahora están surgiendo muchas asociaciones hispanistas ¿Qué opina de ellas?
JMZ: Están avanzando y empezar por usar Internet es un buen medio, si bien, se debería hacer más hincapié en el concepto de unidad y no de reunificación pues el Imperio Español forma parte del pasado y no va a volver, pero la posibilidad de construir algo hermoso juntos aprovechando que compartimos idioma y cosmovisión sí, es el camino por el que España e Hispanoamérica deberían ir.
JLRDP: A ese respecto Juan Miguel ¿Qué opina de la posibilidad de la creación de una Federación de Estados hispanos que compartieran principios básicos basados en la libre circulación de personas y mercancías entre sí?”
JMZ: Pues esa sería magnífico, tener la posibilidad de lograr eso que dices porque no olvidemos que España en una ventaja con respecto al resto de países europeos en materia de inmigración pues puede contar con aproximadamente quinientos millones de habitantes que comparten la cultura y valores con España y ello no supondría el riesgo de la perdida de la identidad cultural como podría ocurrir con la inmigración en el resto de Europa en el que por ejemplo un argelino podría, en el mejor de los casos, tardar más de tres generaciones en integrarse en la cultura sueca y aún así dicha integración sería muy difícil…
JLRDP: Pues ya no le quito más tiempo, muchas gracias y ha sido un placer conocerlo.
JMZ: Encantado, Jesús.
Para finalizar este artículo y aprovechando que esta noche vienen los Reyes Magos y tras el auge del movimiento hispanista y de numerosos testimonios como los que hemos presenciado hoy, yo les pediría no sólo que nos colmen a los hispanos de ambos lados del Atlántico de regalos sino de autoestima pues juntos fuimos un imperio y unidos podemos lograr grandes objetivos.
Por Jesús Legaza Ruiz de Peralta